Bajoz Reserva 1999 premiado con un Manojo de Oro
Con el galardón obtenido por Viña Bajoz, los vinos de la D.O. Toro vuelven a introducirse en el selecto "club" de los Manojo, puesto que en la última edición del certamen ninguna de las dos cooperativas de Toro trajo a sus vitrinas premio alguno, algo que no ocurrió en ediciones anteriores.
El vino "Bajoz 99" ha tenido que recorrer un largo camino antes de ser galardonado con el Manojo de Oro. Ya en el mes de abril se iniciaba la andadura de este caldo, momento en el cual la bodega enviaba las muestras al prestigioso concurso destinado a cooperativas. Seguidamente, el caldo fue sometido a una pre-cata realizada durante los días 11 y 12 de mayo y en la que participaban más de 500 vinos de todas las regiones vinícolas del territorio nacional. Tras este primer escollo, se hacía público que el "Bajoz 99" y el "Bajoz 2003" habían pasado los iniciales y difíciles obstáculos; también esta prueba fue superada por otros dos caldos de la cooperativa Covitoro. Los cuatro vinos de la Denominación de Origen Toro estuvieron, por tanto, compitiendo en la cata final, celebrada el pasado día 26 de mayo, con otros 38 vinos seleccionados de cooperativas toda España. Ayer mismo, tras la deliberación de un jurado compuesto por 40 enólogos, se daba a conocer la lista de los elegidos en la que figuraba el reserva de Bajoz, un caldo elaborado, cien por cien, con Tinta de Toro.
En cuanto a su ficha de cata, el vino premiado ha permanecido un mínimo de doce meses en barrica de roble americano, mientras que la vinificación se ha producido mediante una fermentación controlada a 28 grados.
La utilización de uvas procedentes de viñedos con edades comprendidas entre los 70 y los 102 años han posibilitado obtener este vino color cereza oscura, expresivo y elegante en nariz y perfectamente ensamblado en boca, donde despliega amplios sabores con una persistencia sin parangón.
Según apuntan los expertos, «este vino debe ser disfrutado lentamente para apreciar el desarrollo de sus aromas complejos».
(Fuente: La Opinión de Zamora)