Las ventas de vino con Denominación de Origen Toro han crecido un 27%

Un estudio de la Junta de Castilla y León determina que las ventas de vino con Denominación de Origen Toro dentro del mercado nacional han crecido en un 27 por ciento durante el primer semestre de este año.

El estudio elaborado por la empresa ACNielsen por encargo del Instituto Tecnológico Agrario ha sido entregado en todas la Denominaciones de Origen de la región y constituye una herramienta de trabajo que la Administración Regional facilita tanto a las bodegas adscritas como a los Consejos Reguladores.

El informe revela en general que existe una tendencia de mayor crecimiento de los vinos con Denominación de Origen con respecto a otras fórmulas de comercialización. Un aumento que a nivel de todo el territorio nacional ha sido del 3 por ciento durante el año 2003 en relación al año anterior.

En relación a la DO Toro pese a que las ventas disminuyeron en un 9 por ciento durante el año 2003 con respecto al 2002, a finales del pasado año se inició un crecimiento que durante el primer semestre del año ha sido de un 27 por ciento en relación al mismo periodo del 2002.

Durante el primer semestre de este año, el crecimiento de los vinos de Toro se ha movido, porcentualmente hablando dentro de unos niveles muy similares a los de Ribera de Duero y está por encima del experimentado en el resto de las Denominaciones de Origen de la región y prácticamente de toda España.

En la Denominación de Toro el estudio recoge la evolución del mercado en los últimos cuatros años, de manera que en 2001 se vendieron 2,1 millones de litros de vino y en el 2002 se aumentó hasta 2,6 millones, mientras que el pasado año la cifra bajó hasta los 2,4 millones de litros.

El mayor volumen de ventas de los vinos toresanos se concentra en la zona centro del país, el noroeste de España, Madrid, el sur, Barcelona, la zona norte-centro, el este y por último el noreste.

El estudio de ACNielsen recomienda “mantener la línea de desarrollo de incremento en otras regiones, ya que se parte de una base de una alta concentración hacia un mercado localista o regional”. Asímismo, aconsejan “seguir aprovechando esa situación óptima que hay para los vinos de calidad en el canal de la alimentación”.